Partiendo de sistemas políticos parecidos, hay países que funcionan y otros que no, y yo creo que tiene que ver con la responsabilidad de los gobernantes para con los ciudadanos y la de estos con sus obligaciones.

Me contaba hace muchos años un suizo que conocí de vacaciones en la playa, que poco después de la última guerra mundial, el Gobierno suizo, que tenía una cantidad de oro que no podía demostrar (lamento no saber aclarar de qué oro se trataba), para salir del lío, lo entregó a unos cuantos miles de ciudadanos para que lo custodiaran en sus casas hasta que el Gobierno se lo reclamara nuevamente, cosa que sucedió sin problemas.

Al margen de la honorabilidad de la cuestión de ese oro, ¿seríamos capaces nosotros de hacer una cosa así?

Otra. Sabemos que en Suiza se hace el servicio militar obligatorio hasta los 42 años. El primer año durante uno o dos meses, lo que sería el campamento de instrucción, en el que reciben sus armas reglamentarias una pistola y un subfusil de asalto y los siguientes (aunque hay variantes), una semana al año. Pero lo mas curioso es que durante todo el tiempo que dura el servicio militar (hasta los 42 años mencionados), mantienen en sus casas su armamento, así como la munición correspondiente, que además pueden comprar cuando se licencian, cosa que hace que un 35% de los suizos tengan armas de guerra en la actualidad. No sabemos de manifestaciones de descontento en sus calles, entre otras cosas porque su gobierno, al margen de las elecciones, tiene la sana costumbre de hacer consultas periódicas a la ciudadanía de todo aquello que es excepcional.

Y yo me pregunto: ¿Tendrán algo que ver estas consultas con el hecho de que los suizos posean armas? O dicho de otro modo, si aquí tuviéramos armas militares en casa, ¿nos mandarían a los antidisturbios a machacar las manifestaciones obreras o ciudadanas de protesta, como se hace, o nuestros políticos dejarían de creerse los dueños del país y nos escucharían más?

Manuel Mora Hernández